Maestro Raymundo Ramírez
Como sabemos en sentido general, el tiempo es una magnitud física que se utiliza para medir la duración, simultaneidad y separación de los hechos y acontecimientos. Esto permite ordenar acontecimientos en una secuencia, de la que se desprenden las nociones de pasado, futuro y presente.
El tiempo para muchas personas es valioso, muchas de ellas deciden invertirlo en actividades que sean de su agrado, así como lo es estudiar, trabajar para enfrentarse a la vida futura, pero que también involucra el saber elegir una buena escuela sin importar la distancia.
En ocasiones tomamos rumbos que hace que tengamos que trasladarnos incluso a otro municipio con la finalidad de forjarse un fututo a través del estudio, y que posteriormente nos ayude a abrir puertas, tal es el caso del maestro Raymundo Ramírez, quien decidió invertir su tiempo en estudiar y trabajar en la Universidad de Ixtlahuaca.
Con apenas 18 años de edad, se convirtió en foráneo, trasladándose cada ocho días de Atizapán de Zaragoza de donde es originario a Ixtlahuaca, dejando a sus hermanos y madre para poder cumplir un sueño.
“Para mí lo más difícil fue el cambio, el cambio de un lugar a otro, era yo muy joven tenía 18 años, el dejar tu casa, tu familia, trasladarme a un lugar, que, sí lo conocía, porque iba anteriormente a visitar a familiares de mi papá, pero yo lo veía de vacaciones, o sea yo dije; jamás me voy a ir a vivir para allá, la diferencia entre un lugar y otro era abismal, Ixtlahuaca es rural todavía, imagínate, antes era más rural, no había ciertas distracciones que yo tenía, pero sobre todo lo que más recuerdo es una de las dificultades de buscar dónde rentar, los lugares donde se rentaba no eran completamente cómodos”
Sin embargo, a pesar de los obstáculos que se pudieron llegar a presentar, el maestro Raymundo decidió quedarse en la Universidad, cumpliendo papeles importantes en distintas áreas administrativas y docentes, colocándolo actualmente como Director del Departamento de Extensión y Vinculación.
“Llegué a estudiar a la Universidad y también a trabajar de medio tiempo, en ese entonces mi papá también entra a trabajar, pero él en tiempo completo, cuando egresé de la licenciatura en derecho, el Rector me da la oportunidad de dar clases en prepa en dos materias, recuerdo que eran “Problemas socioeconómicos de México” de quinto y sexto semestre, no tengo presente cuántos años fueron, pero si fueron como unos cinco años que estuve dando clase, después de ahí estuve trabajando en el Centro Integral de servicios académicos empresariales, algo así era el nombre no recuerdo bien, en pocas palabras era de asistencia social o servicio social que tenía la universidad, en 2003 el Rector me dio la oportunidad de estar ahí como secretario técnico y dando clase también, posteriormente di clases ya en licenciatura, me invitaron en administración, también en contaduría, dando las materias de derecho laboral y administrativo, después también en criminología, me invitó en ese entonces el maestro Andrés Bernal, para dar la clase de sociología criminal o sociología política criminal, en el 2009 el Rector me da la oportunidad de ser jefe de la Unidad de Extensión y Vinculación (antes era una Jefatura de vinculación) posteriormente en el 2012 cambia a Dirección de Extensión y Vinculación, que es el puesto que actualmente tengo, ya son 14 años.”
Durante su trayectoria, el maestro llegó a vivir grandes momentos, muchos de ellos emotivos, simbolizando el amor que le había tomado a la Universidad, desde que comenzó como estudiante y terminó como trabajador administrativo, y en su trayectoria se ve reflejado.
“Yo recuerdo que no quería quedarme, sin embargo, lo hice y creo que es una de las mejores decisiones que he tomado en mi vida y prueba de ello es que ya tengo tantos años aquí en la Universidad, mi trabajo, mi vida, mi tiempo. Aquí construí una casa, aquí tuve a mis hijos, mis hijos estudian aquí, haciendo memoria un logro importante fue cuando mi hija salió de preparatoria y ahora está estudiando cirujano dentista y yo creo que eso es también un momento padrísimo, que yo estudié y que ahora mis hijos se están formando en la Universidad y los aniversarios que yo creo también son momentos, el décimo aniversario, los diez años me acuerdo del veinticinco y del treinta aniversario, a tu servidor le han reconocido el tiempo que he tenido en la Universidad, nos han entregado reconocimiento por estar tanto tiempo trabajando aquí en la universidad”
Cabe destacar que el saber utilizar tu tiempo en actividades te dar paso para poder desarrollar distintas habilidades, ahora si le agregamos una escuela que te brinde esas oportunidades, ya que estudiar y trabajar a la vez permite desarrollar habilidades y competencias muy valoradas en el mercado laboral.
Dichas habilidades como la gestión del tiempo, la organización y la capacidad de trabajar bajo presión son algunas de las destrezas que se fortalecen al combinar ambas actividades. Esto permitió que el maestro Raymundo generara una experiencia y amor a la Universidad, mismo que lo ha mantenido 25 años dentro de la Universidad.
“25 años que han pasado, han sucedido muchísimas cosas y mira ya al decirte que vine a comprar algo aquí, ya es todo, mis hermanos se vinieron, mis sobrinos estudian aquí, mi hermano también estudió aquí la licenciatura en criminología, estuvo muchos años trabajando aquí, prácticamente toda la familia nuclear nos venimos, yo creo que en Ixtlahuaca vamos a seguir un rato más.”
A partir de este testimonio podemos comprender que existen personas que desde muy jóvenes tienen que tomar la decisión de trabajar y estudiar, y que los lleva a distintos lugares, en este caso la Universidad de Ixtlahuaca, que dio cobijo a los anhelos de un joven que quería forjar un futuro, y que ahora se ven reflejados en la trayectoria académicamente y de vida del maestro Raymundo Ramírez, misma que es consecuencia del esfuerzo y compromiso para con aquella institución educativa que le abrió los brazos y que ahora recibe la fidelidad y compromiso institucional de un Jaguar de Corazón.
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